CAROLINA INÉS GAITÁN

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Comencé con Reiki Usui en el año 2000 dando mis primeros pasos con un sistema tan especial y armónico como este. Mi fin siempre fue y continúa siendo poder ayudar a los demás, desde el lugar que se me permita.
Cada paso que di en Reiki, realizando sus niveles, me ayudó  a percibir  que la tarea que tenía encomendada con los otros era fuerte y se acrecentaba a medida que quería mejorar la técnica y agregar siempre nuevas herramientas para enriquecer mi labor.
Comienzo a estudiar Metafísica en el 2003  donde amplío mucho más el campo de acción, adquiero nuevos conocimientos que me ayudan a crecer interiormente y poder comprender mejor a mis pacientes.
En el 2006 recibo la Maestría en Reiki y con ella llega el comienzo de una nueva etapa que me permite poder formar a otros en el camino de Reiki, una gran responsabilidad, para que también puedan llevar con sus manos alivio físico, emocional a sus seres queridos y pacientes.
En mi camino de aprendizaje aprendí la Terapia con Flores de Bach con la cual también trabajo mediante entrevistas, para que juntos podamos determinar suavemente el mejor camino para concretar la armonía, el empuje, la fuerza, etc. O sea lo que cada uno necesita en ese momento particular de su vida.
Realice cursos de Ángeles, Elementales de la naturaleza, Mandalas los cuales también dicto con gran amor, cada uno aporta un conocimiento diferente para continuar andando en la vida.
Mandalas es uno de los cursos donde aprovecho para intercalar un poco de todos los conocimientos que he adquirido y mezclarlos con la pintura, el dibujo y los colores, herramientas propias del trabajo con Mandalas.

 

Cada curso que dicto, cada sesión de Reiki que puedo dar es gratificante y tiene como fin que ustedes puedan siempre aplicar lo aprendido o recibido, en su día a día, en el contacto con los demás, en sus relaciones, sus trabajos, su vida diaria.
 

Una mejora en el estado físico, emocional, mental de la persona es como la piedra en el estanque su onda se expande a todos los que la rodean incluso puede llegar a lugares inimaginados. Por eso, es importante recordar, que el bienestar personal, no solo es para uno mismo sino para bien de todos.
Todos somos UNO.